sábado, 26 de septiembre de 2009

¡ay el cuerpo!... extrañaba sentirlo.

¿Por qué me enfermo tanto de gripe y de tantas cosas? sin duda es la falta de ejercicio... Asi que sin pensarlo mucho, decidí ir al gimnasio... pagar un año y obligarme a ir. Y en eso estoy, tengo ya un par de semanas entrenando. Finalmente toda la primera parte de mi juventud la pase haciendo ejercicio... mucho ejercicio entre el ballet y la danza. Pero me han pasado muchas cosas, observo que efectivamente la idea de la competencia me da muchísima pereza, que el ejercicio es para mi algo mucho mas gozoso que competitivo, que detesto a los heterosexuales machos estúpidos que compiten a ver quien hace mas planchas, que me da muchísima risa las mujeres que al fin en celo, se pavonean frente a cualquiera que parezca casadero, ¡ay los bugas! que pereza me dan.

El segundo día que estuve en los vestidores, habían varios usuarios. Cuando comencé a desnudarme ví como uno de ellos me veía de reojo, y en cuanto vio que me puse un suspensorio, tuvo una erección y no pudo quitarme los ojos de encima. Los bugas no usan suspensorio. Me turbo, pues no siendo un lugar Gay me parece muy peligroso el ligue y la incertidumbre de si confundo o mal interpreto las cosas... Pero lo cierto es que ese tipo, todo el tiempo estuvo pendiente de mi. se coloco al lado de la caminadora, de los aparatos de pierna, y de lejos me observaba... cuando me metí a bañar él se metió detrás de mi y a distancia me veía. Cuando ya estábamos fuera de las regaderas y vistiéndonos, por supuesto que se encargo de que le viera la verga. hasta se la sacudió un poco antes de subirse la truza. Era lindo tipo, fuerte, cuerpo definido, muy peludo, blanco y agradable y me resulto muy halagador sus miradas.Me da muchísima curiosidad el pudor de los heterosexuales, la gente no se desnudan frente a otros, y si entran a las regaderas se dejan la truza y ya en el cubículo se desnudan... que raritos. pero la experiencia del ejercicio, del sudor, de el roce del cuerpo con el cuerpo mismo, y la visión de tantos bellos hombres es algo tan lúdico, tan erótico y sensual que termino mi rutina feliz, excitado, ansioso por salir y como me pongo un i pod ... hasta termino cantando.

3 comentarios:

Isidro R. Ayestarán dijo...

Hace mucho que ya no voy al gimnasio (incompatibilidad con los horarios), pero has descrito una escena mil veces repetida: las miradas de reojo, el compartir aparatos de deporte, el vestuario, el seguirnos hasta las duchas (me encanta lo de "regaderas").

En fin... creo que habrá que apuntarse de nuevo.

Besazos
ISIDRO

Unknown dijo...

Hola Isidro.
Gracias por tu visita... y si, acá se dice regaderas,
saludos

kappyqueens dijo...

Me suena que quiere algo.
jejeje, Da morbo leerlo.
Besos mi querido Diego.
Estoy de acuerdo con Isidro, me encanta lo de "regaderas", cuanto tengo que aprender.